La eliminación de los aranceles al aluminio y acero da una buena señal para la ratificación del
T-MEC que podría darse entre septiembre y octubre.
El pasado viernes, Estados Unidos acordó retirar los aranceles de aluminio y acero procedentes de Canadá y México a cambio de un endurecimiento de las medidas para impedir que el acero chino entre a territorio estadounidense procedente de ambas naciones.
“Recibimos con gran entusiasmo la decisión del Presidente Trump y de la USTR de eliminar los aranceles impuestos a México y Canadá al aluminio y acero. Esta acción abre el camino para avanzar hacia la ratificación del T-MEC”, dijo Jesús Seade, subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) a través de su cuenta de Twitter.
Por su parte México y Canadá se comprometieron a suprimir las medidas retaliatorias que mantenían sobre ciertos productos estadounidenses.
“Nos mantuvimos firmes y no nos echamos atrás hasta lograr el resultado de hoy. Como resultado de la decisión de hoy de los Estados Unidos, Canadá levantará sus aranceles de represalia”, dijo Trudeau en un comunicado.
En el consenso logrado entre los tres países se realizó el compromiso de implementar medidas para prevenir la importación de acero o aluminio de otros países a precios dumping, para evitar la triangulación de productos siderúrgicos de otras regiones y el establecimiento de un proceso para monitorear el flujo comercial de los metales ya mencionados.
La industria siderúrgica de México es relevante, dado que el país es el catorceavo productor de acero en el mundo, con una producción anual de 20.2 millones de toneladas de acero líquido, y genera alrededor de 700 mil empleos directos e indirectos, de acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero.
Fuente: www.opportimes.com
Fuente: www.efinanciero.com
