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El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Salazar Lomelín, convocó a los empresarios a avanzar en el gran acuerdo nacional para reactivar la economía del país frente a la emergencia sanitaria por el Covid-19, a responsabilizarse de las necesidades de otros y a olvidarse de las utilidades.

“Intentaremos no dejar a nadie atrás, que nadie se quede con el apoyo que requiere y que se recuperen los trabajos, no nos quedaremos de brazos cruzados, se los aseguramos; este acuerdo nacional es la manera en la cual nosotros queremos ir integrando a todos de una manera organizada”, estableció.

En medio de la crisis de salud y económica por el Covid-19, Salazar manifestó su preocupación por el encono que existe entre la sociedad mexicana en momentos de crisis como la que atravesamos y enfatizó que los empresarios no pretenden ser “caja de resonancia de ninguna frustración de quienes pretenden cambios acelerados”, por lo cual llamó a la unidad para salir de esta doble crisis de salud y económica.

Durante una videoconferencia titulada “Empresario unido ante el Covid-19” frente a 7,000 empresarios, el dirigente del CCE sentenció: “Los empresarios no queremos ser una caja de sorpresas ni queremos ser una caja de resonancia para las frustraciones de todo aquel que quisiera cambios rápidos o que quisiera situaciones que nos parecen totalmente de desunión o de no concordancia con los objetivos de solidaridad y fraternidad que nosotros estamos proponiendo”.

Como parte del acuerdo nacional, el dirigente empresarial delineó tres objetivos para avanzar en la recuperación: el primero es concienciar a la población de la gravedad a la salud que significa el coronavirus; el segundo, crear un vehículo a través de las organizaciones empresariales para que “ningún mexicano que está teniendo el impacto de esta crisis se quede sin tener ayuda de parte del sector empresarial mexicano”. Mientras que el tercer punto es fortalecer el acuerdo de unidad y sin política.

Sin embargo, Gustavo de Hoyos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana, y Enoch Castellanos, dirigente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), calificaron como “desafortunada” la narrativa del presidente Andrés Manuel López Obrador de negarse a otorgar apoyos a las empresas, por lo que afirmaron que elevarán el tono de exigencia.

“Tenemos que elevar el tono de exigencia al gobierno y no permitir que se abandonen a la micro, pequeñas y medianas empresas, ni tampoco permitir que se estigmatice a las grandes… (A los empresarios) que no se nos pretenda señalar como los culpables del problema de desempleo que se nos viene. Ha habido paciencia y las puertas se cerraron, tenemos que hacer que las puertas se abran”, indicó De Hoyos.

“El reto que tenemos enfrente es una crisis de liquidez, una empresa sin liquidez se muere de asfixia. Hay que ejercer medidas extraordinarias, no es momentos de cuidar la productividad sino la marca de la empresa. Hay que meterle presión al gobierno a que tome acciones”, mencionó el dirigente de la Canacintra. Carlos Salazar comentó: “Sabemos que el gobierno federal tarde que temprano se unirá también a este tipo de acuerdos, eso es lo que esperamos”.

Por su parte, el resto de las organizaciones, como la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales y la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo, informaron sobre la operación de su labor diaria, en donde pusieron a disposición de los empresarios de todo el país y sus colaboradores un programa de capacitación a distancia.

Fuente: www.eleconomista.com.mx

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